Entre las medidas de atención social que desarrolla el Ayuntamiento de Sant Joan Despí para hacer frente a las necesidades sociales generadas por el coronavirus, esta semana ha comenzado un seguimiento telefónico de las personas o parejas mayores que viven solas (sobre todo de las que tienen más de 70 años). El objetivo es conocer su estado de salud y, sobre todo, dar apoyo emocional ante el confinamiento, que ha incrementado el aislamiento de estas personas, muy preocupadas al ser un colectivo de riesgo.

Las personas destinatarias de este servicio suman casi un millar de ciudadanos y ciudadanas. El Ayuntamiento ha organizado diferentes equipos de seguimiento con personal municipal (utilizando también el teletrabajo), que dan un promedio de 400 llamadas al día, de una duración media de 15 minutos, con lo cual garantiza un contacto continuado con estas personas.

Las personas mayores de la ciudad son objetivo prioritario. Aparte del servicio telefónico, a las personas usuarias del comedor municipal del Centro de Gente Mayor Cirerers, el Ayuntamiento las lleva la comida a domicilio. Además, el Servicio de Atención Domiciliaria (SAD) se ha reforzado en los casos más vulnerables, ampliando el servicio de teleasistencia.

Ayudas a niños y niñas con beca de alimentación
Por otra parte, también se está haciendo un seguimiento de las familias con niños y niñas que disfrutan de las becas comedor para asegurar su correcta alimentación con el reparto de vales. Ya se han repartido un centenar, a la espera de las ayudas anunciadas por la Generalitat y que aún no es se ha hecho efectivas.