Hace cuatro años el Ayuntamiento puso en marcha la Oficina de Energía con el objetivo de trabajar con criterios más eficientes y sostenibles el consumo municipal de electricidad, gas y agua.
El ahorro irá creciendo gracias a acciones que apuestan por la eficiencia energética como la instalación de tecnología led en farolas y semáforos.

Esta es un ingente trabajo que implica políticas que van desde la instalación de alumbrado más eficiente al reajuste de horarios de encendido del alumbrado, por ejemplo. Sin duda, el grueso del trabajo de la Oficina Energética se centra en el consumo de luz que, en 2015, se ha reducido en 136.747 euros respecto al año anterior (en 2014 la factura ascendía a 1.447.858 euros y , en 2015, fue de 1.311.111 euros). La reducción en kWh ha sido de 770.417 kWh menos que representa alrededor de 206 toneladas de CO2 que se han dejado de emitir a la atmósfera.

Medidas que ya son una realidad

Esta reducción, una tendencia que se consolida después de tres años de descensos continuados, está directamente relacionada con la mejora de los contratos, el reajuste de las potencias de los equipamientos municipales, la formación del personal municipal y también por la sustitución por leds en el alumbrado público y el sistema semafórico.

Desde hace unos años, las calles y plazas que se remodelan ya incorporan la tecnología leds, y en paralelo, el Ayuntamiento está sustituyendo las otras calles, las más recientes en la calle José A. Goytisolo (donde esta semana se incluye la colocación de leds en 80 farolas) y el paseo del Canal, donde se han instalado 23 nuevos puntos de luz de este tipo. El cambio por esta tecnología más eficiente representará un ahorro aproximado de 8.700 euros al año. También se están cambiado las ópticas de los semáforos (en 2015 se sustituyeron 73) con el objetivo de completar toda la ciudad en los próximos años.

El primer paso en este camino para reducir el consumo de electricidad se inició con una auditoría de todos los equipamientos municipales y el alumbrado que ya ha dado frutos. A pesar de estas buenas cifras, el Ayuntamiento continúa trabajando en la implantación de medidas más eficientes como la monitorización de consumo en equipamientos que concentran mucho gasto, como los polideportivos. Un control que permite conocer en tiempo real y de manera muy precisa donde se están produciendo gastos excesivos y cuál es la mejor manera de reducirlas.